viernes, 19 de noviembre de 2010

Un Infierno Encantador

Sinceramente, ¿quién de todos ustedes pensaba que luego del tercer gol de la Liga el “Diablo” resurgiría en lo más alto del cielo? En esos 2800 metros sobre el nivel del mar, en donde este gran equipo ecuatoriano se viene haciendo fuerte desde 2006 en donde Liga tuvo, por nombres, el mejor equipo de toda su historia. Recordemos que en 2008 comenzó a escribir su historia en América ganando la tan preciada Copa Libertadores de América y actualmente es el campeón vigente de la Sudamericana y viene de consagrarse en el mes de septiembre en el mejor del continente Sudamericano al derrotar en la serie de ida y vuelta (2-1 y 0-0) al mejor equipo argentino en la actualidad, Estudiantes de la Plata.
Ahora con estos antecedentes y pergaminos sobre la mesa, nadie pensó que el 3-0 a los 10 minutos del segundo tiempo se podía convertir en un 3-2 final, dejando al equipo argentino con la serie abierta a definir en Avellaneda.
Pero como el fútbol, vive de estados de ánimo y emociones…nos regaló un final a todo vértigo y con cierre inesperado para todos… por eso es tan lindo este deporte!!!
Con el tercer gol convertido por el equipo “Blanco”, el Rojo estaba con los dos pies afuera de la copa, porque en el ambiente se presentía que llegaría el quinto gol de la Liga antes que el cuarto…pero nada de esto paso…
Demasiado castigo ya había recibido este equipo rojo (ayer de azul) ya que no mereció estar en desventaja ni por la mínima diferencia. Pero en una ráfaga de 15 minutos, contando el entretiempo, los ecuatorianos se encontraron con una diferencia poco pensada hasta ese momento, porque el desarrollo del partido se inclinaba para los argentinos que con un planteo sumamente inteligente de su DT “Turco” Mohamed, supo mantener a raya al “Cuco” de Sudamérica.
Porque el Turco alertó sobre las consecuencias que podía traer el jugar golpe por golpe, el dejar que Barcos gire, el no obstaculizar los remates de media distancia. Y sus jugadores cumplieron estas indicaciones con éxito durante buena parte del partido. Godoy, Battión (sobre todo) y Fredes coparon el medio y trabaron los ataques de la Liga en grandes lapsos del cotejo. El primer tiempo estaba para cerrarse 0-0, sin haber sufrido demasiados sobresaltos, pero las emociones se hicieron notar y con el segundo zapatazo de la noche realizado por Salguiero sobre el arco de Navarro (el primero fue de Urrutia), convirtió el golazo que le abrió el partido.
La segunda mitad no encontró a un Rojo alicaído ni atrincherado y por salir a buscar el partido a lo loco sin medir el efecto de la altura (recordemos la estrepitosa caída de Argentina contra Bolivia 6-0)  y no seguir con el plan diseñado a la perfección por su técnico de defenderse con la pelota, buscando el momento para dar el golpe…en apenas 10 minutos se encontró con un NKO de 3-0.
Pero este nuevo Independiente parece que cuanto más hundido está, aflora su amor propio, su garra para salir delante de momentos difíciles (recordemos el duelo con los uruguayos) y con un gol de rápida jugada que Silvera convirtió (en posición adelantada) con un tiro esquinado sobre la estirada del arquero ecuatoriano y con una “Vaselina” desde 23 metros de Mareque con pierna derecha (la tiene solo para caminar), salió del fondo del abismo y casi tocó el cielo…
La Liga se quedó con el primer chico…pero los Rojos tomaron este resultado como una victoria. Aunque no es seguro (Estudiantes, en la Recopa 2010, perdió 2-1 allá y acá fue 0-0), el resultado suma y mucho. Por la remontada, por el cambio de aire, por lo anímico, porque se salió del infierno y casi se gana el cielo.



Por Gabriel D`Onofrio
(Sin Achique)